El territorio que hoy ocupa San Luis Potosí se caracterizó en la época prehispánica por ser la frontera entre las dos zonas geográficas y culturales que había en aquel entonces: Mesoamérica y Aridoamérica; la región que hoy es el Altiplano perteneció a esta última.
En la región de Aridoamérica radicaron los grupos indígenas que recibieron el nombre genérico de chichimecas y cuya extinción se registra hacia la primera mitad del siglo XVII (Monroy y Calvillo, 1998:41).
Al igual que para la mayoría de los grupos indígenas, el medio geográfico determinó el modo de vida de los chichimecas y este grupo subsistió gracias a la cacería y la recolección de frutos silvestres, y en algunos casos a la agricultura menor; rasgos que explican por qué no establecieron asentamientos fijos; contrarias a los grupos que vivían en Mesoamérica, que se caracterizaron por tener como actividad primaria a la agricultura, lo que les permitió la construcción de grandes centros con estructuras e infraestructuras claramente organizadas.
Los habitantes de Aridoamérica, a diferencia de los pobladores de Mesoamérica, mantuvieron sus núcleos tribales y una gran movilidad y versatilidad en las funciones de la vida cotidiana y religiosa (Monroy y Calvillo, 1998:42).
Los registros que tienen datos de los pobladores del Altiplano, señalan que eran los guachichiles, que ocupaban toda la región, así como Guanajuato, Jalisco y Zacatecas.
En casi toda la extensión de la Gran Chichimeca escaseaban los alimentos. En unos cuantos sitios los indios cultivaban maíz y algunos tipos de calabaza, pero habitualmente dependían de tunas mezquites bellotas, semillas y raíces, así como de la caza y pesca… los cactos y mezquites ofrecían alimentos básicos. Los aborígenes comían tunas crudas, secas o en forma de licor. También las hojas, el corazón y las flores de los cactos, a menudo cociéndolas en hornos subterráneos. Con el mezquite hacían un pan blanco, en grandes rebanadas, que seguía siendo comestible durante muchos meses o hasta un año, y de la misma planta preparaban licor. En toda la gran chichimeca se consumía la miel de abeja. El jugo del agave se utilizaba en lugar del agua cuando esta no podía obtenerse. También comían un fruto llamado “dátil” por los españoles. Algunas de las raíces que comían eran patatas dulces o yuca, Otras eran de la planta llamada címatl (frijol rojo) por los mexicanos. (Monroy y Calvillo, 1998:47).
Las formas de preparación de los platillos en esta etapa de la historia se pueden agrupar en dos grandes categorías: el consumo directo, resultado de la recolección y la caza sin ningún tipo de cocción, y la ingestión de alimentos parcialmente cocidos.
Fuente: María Isabel Monroy, Tomás Calvillo Unna, Breve historia de San Luis Potosí, El Colegio de México; FCE, 1997.